El borrador del informe ‘España 2016′, que la Comisión Europea presentará a finales de este mes, refleja que el país ibérico sigue siendo uno de los peor parados de la Unión Europea a pesar de la recuperación, ya que casi un tercio de la población está en riesgo de pobreza o exclusión social. Bruselas advierte que la mejoría económica no se traslada al ámbito social, en el que sigue habiendo cifras devastadoras: un tercio de la población subsiste con ingresos inferiores al 60% de la mediana de los hogares de 663 euros al mes. Además, una de cada ocho personas con empleo en España es pobre. Un tercio de la población y tres millones de niños están en riesgo de exclusión social y pobreza. Las líneas de ingresos mínimos presentan grandes diferencias entre comunidades autónomas y los inmigrantes no europeos y los gitanos siguen siendo los más perjudicados. Los desahucios siguen teniendo consecuencias significativas y nefastas.A pesar de que la economía creció un 3,2% durante el año pasado en el país ibérico, hay más pobreza, más paro de larga duración, y más trabajo a tiempo parcial, que ha ascendido en los últimos diez años del 12% a más del 15%. El riesgo de pobreza de estos trabajadores aumentó del año 2013 a 2014 del 18,7% al 22,9%. Europa apoya la reducción salarial y la creación de más empleo a tiempo parcial, como parte de las reformas laborales llevadas a cabo entre los años 2012 y 2014. Sin ellas, “se hubieran perdido 400.000 empleos adicionales y la recuperación del mercado laboral hubiese comenzado más tarde”, explicaba la Comisión. Sin embargo, España se mantiene en niveles de pobreza severos. El país, que ya contaba con los índices más altos de desigualdad en Europa antes de la crisis, han aumentado en los últimos años hasta alcanzar 1,3 millones de personas. No obstante, un informe del Instituto Juan de Mariana desmontaba recientemente el “mito” de la España de las desigualdades, llegando incluso a colocar al país ibérico entre “las sociedades más igualitarias del mundo”. (fonte Euractiv.es)