España, con un 10,1% de población extranjera, está entre los diez Estados miembros con mayor proporción respecto al total de residentes, según publica la Oficina de Estadística de la Unión Europea. España ocupa el octavo lugar de la lista. En el caso del país ibérico, el 5,8% procede de un país no comunitario, y el 4,3% de otro Estado miembro: el 15% del total de inmigrantes tienen origen marroquí, sólo superado en un punto por el de extranjeros de origen rumano. Lo procedentes de Reino Unido (7%), Ecuador (5%) e Italia (4%).